🎋 Día 3 – Sé flexible
Cuando pensamos en flexibilidad, lo primero que imaginamos suele ser algo físico: estirar más, llegar un poco más lejos. Pero la flexibilidad también es una actitud, una manera de vivir y responder ante lo que nos ocurre.
A veces somos demasiado duros con nosotros mismos: exigentes, rígidos, inflexibles. Nos hablamos con dureza, nos castigamos por equivocarnos, nos cuesta darnos permiso para descansar o cambiar de opinión. Cultivar flexibilidad empieza ahí: en tratarnos con suavidad, en ser nuestros mejores aliados.
🌱 Hoy la intención es ser flexibles. Con el cuerpo, sí, pero también con la vida: abrirnos a nuevas perspectivas, permitirnos decir “quizás”, cambiar de rumbo, soltar el control. Flexibilidad es suavidad, confianza y apertura.
Como recordaba Maya Angelou:
“Hicimos lo mejor que pudimos con lo que sabíamos entonces y, cuando supimos más, hicimos más.”
Que hoy puedas mirarte con más compasión y menos exigencia, reconociendo que siempre estás en proceso, siempre aprendiendo, y que cada paso ya es valioso en sí mismo.